“Es muy complicado el reconocimiento del ambiente cultural sanjuanino”

Mamá de tres hijos, cantante, arquitecta, empresaria gastronómica. Claudia Pirán estuvo en el programa La Ventana, conducido por Juan Carlos Bataller y Juanca Bataller Plana, y habló de todo. La artista, hincha de Boca, futbolera y excelente cocinera, según la catalogaron sus propios hijos, contestó todas las preguntas que le hicieron los conductores en las que develó su historia de vida.

-¿Cómo te llevás con el jurado del programa “Canta conmigo ahora”?

-Por esta propuesta laboral tengo que estar mitad del tiempo en Buenos Aires, mitad en San Juan. Pero es gratificante. Entre el jurado hay mucho cariño, convivimos en una armonía total, es muy divertido, en una carpa donde está armado el living y nos atienden como reyes. El 10 de octubre es la final la gente elige, luego empieza la segunda etapa del programa y ya está el casting en todo el país todavía hay incertidumbre sobre el jurado.

-¿Le dirías a tu familia si te quedara un día de vida?

-Creo que sí, para hablar justamente de que uno trasciende a otro nivel, no se va. A lo mejor no me puedan tocar, pero la presencia seguirá. Lo hablamos mucho respecto a la presencia de mi papá, que siempre está presente en todas las anécdotas. La muerte es simplemente un momento en el que uno desaparece físicamente. Pero queda lo que uno sembró.

-¿Qué fue lo más difícil, enterarte que fuiste adoptada, adoptar, haber tenido a Emilio o el divorcio?

-En el ámbito legal fue muy difícil la adopción de los mellizos. No por ellos, ni por el amor, sino por lo que pasó y todo lo que tuvimos que hacer y pasar para llegar a la instancia final de la adopción. Desde lo emocional, el divorcio fue lo más difícil. Me enteré que era adoptada, un día que mi papá me sentó en un sillón para contarme. Mi respuesta fue: “para eso me llamaste”. En mi casa la adopción fue algo natural, para toda la familia. Hoy en mi casa es lo mismo. Adopción es una situación legal ante un acto de amor que es tener un hijo. No es algo dramático ni un acto heroico, ni nos vamos a ganar el cielo.
En cuanto a tener a mi hijo, me jugué la vida. Me aconsejaron no tenerlo. Hice un pacto con la Virgen María, y le dije que si me daba ese hijo era porque yo iba a poder cuidarlo. Cuando me enteré que estaba embarazada de Emilio, supe que iba a estar todo bien, a pesar de todos los pronósticos. De hecho hice un recital con 37 semanas de embarazo.

-¿Cuándo te preguntan qué haces decís que sos cantante, arquitecta, jurado, o empresaria gastronómica?

-Digo que soy cantante., siempre lo fui, es lo primero que fui. No lo dudo en responder.

-¿A qué cantante sanjuanina elegirías para formar un dúo: Melisa Quiroga, Susana Castro, Paola Hascher, Mariza Gil?

-Qué quinteto armaríamos todas. Me encanta Mariza Gil. Aprendería mucho de ella. Me encantaría cantar flamenco, que me enseñe ese salero. Sería una linda fusión. Además la adoro. Tendríamos una gran conexión, porque eso es muy importante arriba del escenario. Con Susana Castro limé todas las asperezas, estuvo en mi restaurante y la pasamos bárbaros. No me quiero ir de este mundo con roces con nadie, en algún momento la vida gira para que se pueda hablar todo.

-¿Cuántas veces te enamoraste?

-Dos veces me enamoré, del padre de mis hijos y de mi pareja actual.

-¿Qué opinás de José Petracchini?

-Lo amo, chocaban los planetas cuando no nos poníamos de acuerdo, somos de carácter fuerte. Le tengo una gran admiración y aprendí mucho. Siempre fui como punta de flecha de los coros y siempre fui muy responsable. Cuando empecé como solista tuve que elegir para no fallar. Pero extraño mucho el coro.

-¿Qué priorizas hacer a esta altura de tu vida: lo que te da dinero, lo que te divierte, lo relacionado a familia o amigos?

-El prestigio nunca me interesó, pero sí divertirme. Lo relacionado a la familia y amigos es lo que hoy estoy priorizando. Obvio que el trabajo y el dinero son importante para que todo esté bien, pero no es lo más importante.

«En el ámbito legal fue muy difícil la adopción de los mellizos. No por ellos, ni por el amor, sino por lo que pasó y todo lo que tuvimos que hacer y pasar para llegar a la instancia final de la adopción».

-¿A qué cantante sanjuanino elegirías para un dúo: Mario Zaguirre, Raúl de la Torre, Gustavo Troncoso, o Daniel Giovenco?

-Con algunos canté, como con Mario al que admiro mucho. Nunca canté con Raúl, me gustaría cantar con él. Le tengo una gran admiración, adoro sus composiciones, creo que podría aprender mucho de él.

-¿Qué cuesta más: hacerse un espacio en Cosquín, entrar en el circuito de artistas de Buenos Aires, el reconocimiento del ambiente cultural sanjuanino o entrar en el circuito que actúan en las fiestas organizadas por los gobiernos?

-Hacerse un lugar como artista es muy difícil. Buenos Aires es muy difícil, pero San Juan también es muy difícil. En esto me la juego. Lo más complicado es el reconocimiento del ambiente cultural sanjuanino. En cuanto a la valorización de tu trabajo, es complicado. No entre los pares, sino entre los organizadores, por ejemplo. Eso se refleja en lo que cobra cada uno. Creo que acá hay temor al fracaso, tiene que haber confianza mutua.

-¿Con quién pasarías unas vacaciones: Jorge Rojas, Marcelo Tinelli, Rony Vargas, Darío Barassi?

-Con Darío Barassi, porque me divertiría muchísimo. Es un amor de persona. Padrazo, familiero, le gusta hacer “nada” igual que a mí. Creo que nos llevaríamos muy bien.

-¿A qué le temes más: perder la voz, el dolor, la muerte, perder el cariño de la gente?

-A perder el cariño de la gente. La voz no me pertenece, la agradezco, pero no es mía, yo soy un puente. La música pasa por vos y se va hacia la gente. Lo que más me dolería sería eso. La muerte es inevitable. Con el dolor es parte de mi vida, es cotidiano. Somos amigos.

-¿Si el diablo te ofrecería fama mundial como cantante, qué le ofrecerías a cambio: el título de arquitecta, diez años de tu vida, no aceptarías la propuesta, el amor de pareja?

-Es muy mentiroso el diablo, no le aceptaría la fama por venir del diablo. La fama es una situación muy etérea. Creo que me la puedo ganar sin darle nada, estoy a tiempo.

-¿Qué canción elegirías para tu despedida final?

 -Me gustaría “Honrar la vida”. Me gustaría irme y saber que aproveché la vida, que la honré.

-¿Cuál es la canción por la que te recordarán más?

-Creo que todavía no la canto. Va a llegar. Es la que no le voy a canjear al diablo.