REFLEXIONES EN EL NUEVO MUNDO

Ante una humanidad que vive cambios a una velocidad increíble, Julio Conte-Grand analiza el papel de la justicia y las respuestas que comienzan a darse

Julio Conte-Grand estuvo este viernes en San Juan para la presentación de su libro Reflexiones en el Nuevo Mundo. Tanto en sus artículos en Nuevo Mundo, reflejados en el libro, como por su importante cargo, es un protagonista privilegiado de los cambios que se viven en el mundo y repercuten enel país.

Conte-Grand es sanjuanino, hizo la escuela primaria en la Modelo y el secundario en el Liceo General Espejo en Mendoza, su fue con 17 años a estudiar abogacía a la Capital Federal en donde tuvo una destacada carrera como abogado.

Desde el 28 de diciembre de 2016, es el Procurador General de la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires. Es decir, comanda más de 8500 personas, entre fiscales, defensores y administrativos, que tienen como ámbito de actuación una provincia que reúne el 40% de la población total del país. Esta es la entrevista con El Nuevo Diario.

-Para tener una idea, ¿qué tiene a su cargo?

-Lo diría así, la provincia de Buenos Aires es el 40% del país. Tenemos18 millones de habitantes, tenemos casi el 38% de la litigiosidad penal del país, tenemos una enorme extensión. Desde la ciudad de San Nicolás al norte hasta Carmen de Patagones al sur, hay mil kilómetros, es decir, el viaje en ruta desde San Juan hasta la Capital Federal, para tener una idea de magnitud. Y 800 kilómetros de este a oeste. Aparte con realidades totalmente diferentes.

«Yo tuve la enorme dicha, de trabajar cinco años con el presidente Arturo Frondizi, y él decía que si todas son prioridades, no hay ninguna prioridad».

-Por lo cual tiene una súper estructura…

-Tenemos 20 departamentos judiciales, con sus fiscales, defensores, asesores de niños, niñas, adolescentes y curadores de personas que tienen alguna restricción en su capacidad de ejercicio por cuestiones vinculadas a salud mental. El Ministerio Público tiene 8.700 personas. La Procuración General tiene a su vez secretarías y algunas unidades que dependen directamente del procurador, como es el caso de la unidad de auditoría, que, como digo, el procurador la coordina en forma directa.

-Es para volverse loco..

-¿Quién dijo que no me volví loco? Es un tema de método. Si tienes claro dónde quieres ir, hay un método correspondiente. De manera que el método es fundamental. El método tiene que ver con el conocimiento de la realidad y lo que está por venir, ver lo que va sucediendo en otros países, hay mucho en el libro de eso, mucho, mucho. Conocida la realidad, uno tiene que conocer los recursos disponibles, que eso es clave, y lo que viene luego es absolutamente fundamental, determinar las prioridades. Yo tuve la enorme dicha, de trabajar cinco años, casi al final de su vida, con el presidente Arturo Frondizi, y él tenía una frase que normalmente la machacaba, que era, si todas son prioridades, no hay ninguna prioridad.

-Julio, ha cambiado mucho el mundo. No solo por la pandemia. Estamos en constante guerra, hay conflictos por todos lados. Viene la inteligencia artificial. Está el problema de los recursos humanos. Los temas que tienen que ver con el derecho, ¿también están cambiando?

-Sin duda, están cambiando, y están cambiando en función de muchos de esos aspectos que vos mencionabas. Voy a tomar uno específicamente. El tema de la pandemia. En la dimensión jurídica penal, provocó consecuencias muy ciertas. Incremento de la violencia, incremento de los delitos intrafamiliares, una modificación sustancial del perfil delictivo, fuera de los muros, la incorporación al delito de un niño o niña o adolescente, para evitar la punibilidad por la imputabilidad del menor.

-No es casualidad que esté en estos días en Argentina una generala que tiene el manejo de la seguridad de Estados Unidos en el sur del continente

-Hay narcotráfico, tenemos terrorismo, tenemos todo junto. La provincia de Buenos Aires adhirió hace 10 años al sistema de persecución del narcomenudeo a nivel local. Es decir, adhirió a lo que se llama el sistema de desfederalización.

-¿Cómo les fue?

-Muy bien. Nosotros somos fervientes defensores del sistema de la desfederalización. Más allá que no llegaron los recursos. La persecución del narcotráfico en la provincia de Buenos Aires no podía hacerse si no se hacía en forma conjunta con la Justicia Federal. Y hemos avanzado en eso y mucho.

«El narcotráfico, además de ser un negocio, es un mecanismo de disolución social y captación de voluntad política y de voluntad de poder».

-El problema es que hoy el narcotráfico también es el que los protege, el que lava activos…

– El crimen organizado del narcotráfico y el narcotráfico a nivel minoritario es un negocio. Es un negocio. Por lo tanto hay que entender cómo es la dinámica del negocio. Además de ser un negocio, es un mecanismo de disolución social y captación de voluntad política y de voluntad de poder.

-¿Y cómo se controla a los propios, a los que cree que están trabajando con usted?

-Nosotros tenemos en la Procuración General una secretaría de Control Disciplinario. Tenemos trámites disciplinarios, tenemos trámites de enjuiciamiento, cesantías y exoneraciones, lo vamos siguiendo, lo vamos acomodando, generamos mecanismos de que haya una custodia interna del comportamiento, delegación de los procesos de enjuiciamiento y disciplinario.

-En las reflexiones en Nuevo Mundo se refiere en varias oportunidades al derecho que está aplicándose en Europa.

-Las cuestiones que enfrenta la Unión Europea tienen que ver con objetivos que son objetivos comunes de la humanidad. La integración, la paz, el tratamiento adecuado de las corrientes migratorias, la consideración de los conflictos entre el interés general y el interés particular y distintas cuestiones.