La fiesta en la Casa de Sarmiento que terminó con escándalo

 Fue en el marco del “Ciclo de música en los jardines del Museo” que se viene realizando desde 2018. Se hizo viral y hay quienes opinan que la música en volumen alto puede dañar la estructura del museo. Dicen que fue una fiesta electrónica.

Desde hace algunos años, el Museo Casa Natal de Domingo Faustino Sarmiento, organiza distintas actividades para atraer más gente al lugar. Una de ellas es el “Ciclo de música en los jardines del Museo”, que se realiza desde 2018 y por el que ya pasaron varios músicos locales, de distintos estilos como jazz, folclore y hasta rock. Sin embargo, fue la última edición de esta propuesta que se lleva a cabo a partir de las 21 hasta las 23, la que levantó la polvareda. Es que el estilo musical al que se recurrió fue el electrónico.

Lo cierto es que el tema se puso en el tapete cuando en las redes apareció una publicación de una usuaria de nombre Maira, en la que comentaba que “es un total atropello a la cultura e historia sanjuanina. No coincido con la temática”. De ahí en más se armó la polémica.

Así, desde Accodepas (Asociación Civil para la Conservación del Patrimonio Sanjuanino) dijeron que debido a que se trata de una casa de adobe y antigua, las vibraciones de la música son perjudiciales. Por su lado, Silvina Vázquez, que es la directora del Museo Casa Natal de Sarmiento, aseguró que no se trató de una “fiesta electrónica” y que el volumen no estaba alto.

De este modo, lo que parecía ser una nueva propuesta para finalizar el mes de marzo, se transformó en una polémica.

Días atrás, en las redes, la Casa Natal, promocionó la actividad a la que llamó “Desierto”, invitando al público a disfrutar de música y visuales para conectarse con la Casa de Sarmiento. Luego de la actividad, publicaron, como siempre lo hacen, las fotos del encuentro. El ciclo de música que publicita siempre de la misma manera. Pero tras la polémica, decidieron levantarlas, para evitar que, según dijeron desde el Museo, se continuara distorsionando la información.

Al respecto Silvina Vázquez, dio declaraciones para realizar su descargo, haciendo referencia a que se trató de un evento cultural, una performance con música, danza y visualizaciones en las paredes, con impronta árabe, que tiene que ver con las raíces de la familia de Sarmiento. También, como es costumbre en estas actividades, hubo degustación de productos regionales como bebidas, algo que también suele ponerse en práctica en algunas funciones del Teatro del Bicentenario. Pero que no se trató de una fiesta electrónica.

Los argumentos esgrimidos por Vázquez apuntan a que la Casa es un espacio cultural abierto, dinámico y flexible, y por eso recurren a puestas en escena innovadoras, para que el público que no es asiduo al lugar, pueda acercarse.

Por su lado, el arquitecto Jorge Cocinero, de Accodepas, aseguró que “es una casa de adobe, con techo de barro y caña. Cualquier música, sin importar el género, le afecta. Las ondas sonoras, por mínimas que sean, son perjudiciales”. Además considera que las autoridades de la Casa se están «desviando» del objetivo que tiene el museo, ya que «es para mostrar la vida y obra de Sarmiento». Ante estas declaraciones Vázquez dijo que quienes organizan las actividades en la Casa Natal de Sarmiento son “profesionales serios”, que trabajan allí desde hace años y nunca harían nada para dañar la casa. Lo llamativo es que, a pesar de ser este un ciclo de música muy publicitado desde el Museo, y que se realiza desde al menos hace 5 años,  antes no hubo quejas.

Tras el alboroto, integrantes de Accodepas se reunieron con la directora y también con el equipo que trabaja en Casa de Sarmiento. Si bien no hubo una postura unificada en cuanto a lo que se considera una “actividad adecuada dentro de la casa”, se comprometieron a continuar con el diálogo en propuestas futuras.

SILVINA VÁZQUEZ-DIRECTORA MUSEO CASA NATAL DE SARMIENTO

“Las actividades que organizamos están responsablemente planificadas, acá se tergiversó todo”

-¿Por qué tanta polémica con esta última puesta de un ciclo que ya tiene años?

-Estoy dando respuestas de algo que no tiene sentido. Creo que hay un trasfondo. Se ha tergiversado algo que se hace en los museos del mundo, en patrimonios o bienes culturales que le pertenecen a la humanidad. En estos sitios se realizan este tipo de actividades. Porque se hacen cuidado, acá realizamos una tarea consciente y responsable. Lo lamentable es que un hecho cultural, una performance, terminó convirtiéndose en una “fiesta electrónica”, y eso no es real.

-¿Se reunió con la gente de Accodepas?

– Sí, los recibimos en la Casa. Aclarar que cuando asumí, comenzamos a accionar con todo el equipo de la Casa de Sarmiento. Es por eso que en esa reunión estuvieron todos. Accodepas pudo escuchar las voces de quienes vienen trabajando desde hace muchos años en el museo, de manera amorosa y muy profesional. Ellos son los que cuidan esta casa. Pero con esta asociación tenemos miradas diferentes de lo que implica un bien cultural. Porque a mí no me gusta hablar de patrimonio. Los bienes pertenecen a todos y entre todos los construimos.

Pero hay posturas diferentes. Cuando terminó la reunión los invité a que recorrieran el Museo y nos dieran su opinión, pero no se quedaron. Se comprometieron a venir en “otra oportunidad”.

-¿Cómo se trabaja en el Museo en relación a estas actividades?

– Hay un equipo de profesionales muy dedicado y que conoce el tema. Dan su mejor esfuerzo con alegría y cuidando este lugar que para ellos también está ligado a sus emociones, por lo que es impensable organizar algo que lo dañe. Yo salí a dar la cara porque ese es mi rol. Pero defiendo a mi equipo y respaldo por completo su accionar.

Todas las actividades que organizamos e invitamos a distintos públicos, están profesionalmente planificadas.

-¿Pudieron abrir el abanico de público?

-Llegamos a gente que antes era impensada, personas que no conocían la casa y ahora vienen y acceden además a la historia de Sarmiento. Porque todo lo que hacemos tiene su relación histórica. Nada es azaroso.

-¿Cambió la Casa Natal en este último tiempo?

-Desde hace un año y medio la Casa dio un vuelco positivo. Se están haciendo proyectos que nunca se habían abordado. Se logró que públicos no acostumbrados, como toda la comunidad huarpe, pudiera acceder a ella y compartiéramos una hermosa actividad. Nos quedamos con eso, no con las polémicas que no construyen.

Porque además me gusta hablar de ciudadanía culturas. Es el compartir respetuosamente, que logremos que estos bienes históricos, puedan seguir compartiéndose, no a partir de cerrarlos. Confiando que hay un público que quiere construir y compartir estos eventos.

JORGE COCINERO, DE ACCODEPAS

“Nos enteramos por las redes sociales que hubo una fiesta electrónica en la Casa de Sarmiento”

“Fue por las redes sociales que nos enteramos de la fiesta electrónica que se hizo en la Casa Natal de Sarmiento, donde se veía chicos bailando. Y en las fotos que publicaron se veía bebidas alcohólicas en horario nocturno.

No se si lo hacen para llamar la atención o para atraer a ese grupo etario. Estoy en desacuerdo con cualquier tipo de actividad en la que se use decibeles que alteran la parte estructural de la casa. 

El Museo es una casa en la que vivió un prócer. Por eso hay que restringir las actividades que desarrollamos. Si se altera la estructura física de esa casa, entonces no se puede hacer. Es una casa que no es antisísmica. No es cualquier casa, como el Museo Franklin Rawson que tiene un lugar adecuado para realizar actividades con música. No estamos cuidando el primer monumento histórico que tiene San Juan. Habría que reglamentar las actividades a realizar para que no cualquier propuesta sea válida.  Hablaremos con los legisladores para ver qué hacer al respecto. Aunque la ley de patrimonio es clara. Pero habrá que especificar las actividades. No estoy en contra del estilo musical, estoy a favor de defender lo poco que hay de patrimonio en San Juan.

 La polémica del horno

En 2021, en medio de la asunción de Silvina Vázquez como directora de la Casa, se desató otra polémica. En esa oportunidad se colocó un horno en el patio, parte de una exposición nacional, la Bienal Sur. Fue Accodepas también que salió al cruce. En ese momento Vázquez dijo que el horno fue sacado de contexto, que “iban a colocar otros en el Teatro del Bicentenario y en el Museo de la Memoria Urbana” y que en tres meses sería desmontado porque era parte de un recorrido federal.

Los argumentos de Jorge Cocinero, en esa oportunidad, tuvieron que ver con que  la Casa Natal de Sarmiento no es un museo donde se producen exposiciones de forma permanente o transitoria, sino que es nada más y menos donde hay que mostrar la obra del Maestro de América.