• 11 de mayo de 2024

La biblioteca más antigua de Argentina y el billete de 100 dólares comparten la imagen de Benjamin Franklin

La biblioteca más antigua de Argentina y el billete de 100 dólares comparten la imagen de Benjamin Franklin

Cuando un sanjuanino habla de la Biblioteca Franklin lo hace, en general, con orgullo.

Es la Biblioteca Popular más antigua de Sudamérica y la entidad civil existente más antigua de la provincia.

Desde su fundación, hace 158 años, presta servicios de carácter público y gratuito con recursos propios, garantizando el derecho de todos los ciudadanos a acceder al conocimiento.

Entre otras cosas, la Biblioteca Popular Franklin, ha sido declarada en marzo de 2005 “de Interés Parlamentario” por la Honorable Cámara de Diputados de la Nación e “Ilustre Institución Benefactora de la Cultura y la Educación de la Provincia de San Juan”, por la Cámara de Diputados de la Provincia, en junio de 2002.

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Lo que muchos se preguntan es por qué la biblioteca lleva el nombre de un famoso estadoudinense cuyo rostro ilustra el billete más conocido por la humanidad, el de cien dólares.

Comencemos por explicar el origen de la biblioteca.

No hay dudas que para Sarmiento la educación pública fue una de las prioridades para un país que quería crecer

.Es por eso que durante su presidencia el país multiplicó  el número de escuelas, trajo docentes a cada rincón y alimentó el desarrollo de las ciencias.

Pero no todo terminó allí.  En lo que se conoce como Ley Sarmiento o ley 419 sancionada el 21 de septiembre de 1870 se fomenta la creación y el desarrollo de bibliotecas populares, constituidas por asociaciones de particulares con el objetivo de difundir el libro y la cultura.

Sarmiento se basó en un proyecto surgido en su provincia natal en1865 cuando, por iniciativa de un joven abogado y docente sanjuanino, Pedro Desiderio Quiroga, se constituye en San Juan la “Sociedad Bibliófila de San Juan”.

Benjamin Franklin es considerado uno de los Padres Fundadores de los Estados Unidos.​

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Como tantas otras cosas la idea de fundar una biblioteca pública había sido promocionada por Sarmiento durante su gobernación (1862-1864) y por eso fue que Quiroga lo incluyó también como miembro de la sociedad. .Eran años en los que la sociedad sanjuanina dio varios hombres de altísimo nivel a la Nación y pronto el emprendimiento sanjuanino captó el apoyo de una “Sociedad Auxiliar de la Biblioteca Pública de San Juan” que se constituyó en Buenos Aires promocionada por un grupo de destacados comprovincianos Salvador María del Carril – ex gobernador y vicepresidente de l país- y  ,Guillermo Rawson, por entonces ministro del Interior de Bartolomé Mitre y  dundador de la Cruz Roja.

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Según el historiador Ricardo De Titto fue el mismo Del Carril quién  haciendo suya una propuesta de Sarmiento, sugirió que el nombre que debía adoptarse debía ser “Franklin” eligiendo ese nombre no solo porque él había sido el creador de este tipo de bibliotecas circulantes en 1739 en Filadelfia sino “porque Benjamín Franklin era colocado en la institución como un patrono, un protector, una especie de santo laico, que debía ser inspirador para todos los miembros de la comunidad. El ejemplo del inventor del pararrayos era el del self made man que progresa en la vida con su esfuerzo personal y a través del conocimiento que las bibliotecas favorecían. No por nada este político, científico e inventor era considerado uno de los “padres fundadores” de los Estados Unidos”. Finalmente, el 17 de junio de 1866 se reunió la asamblea constitutiva de la sociedad Franklin Biblioteca Popular y se eligió a la primera comisión directiva, recayendo la presidencia en el doctor Isidoro Albarracín.

El rostro de Benjamin Franklin quizás sea el más conocido del mundo, por ser la cara del billete más popular del mundo, el de 100 dólares.

Nació en Boston, el 17 de enero de 1706​ y murió en Filadelfia, el 17 de abril de 1790). Digamos que, en términos muy generales  fue un político, polímata, científico e inventor estadounidense. Pero si profundizamos un poco más advertimos lo siguiente:

>Es considerado uno de los Padres Fundadores de los Estados Unidos.​

>Ganó el título de «El Primer Estadounidense» («The First American») por su temprana e infatigable campaña por la unidad colonial, inicialmente como autor y portavoz en Londres para varias colonias.

> Fue fundamental en la definición del ethos americano de los valores prácticos de ahorro, trabajo duro, educación, espíritu comunitario, instituciones autogobernadas y oposición al autoritarismo político y religioso, con los valores científicos y tolerantes de la Ilustración.

>Franklin se convirtió en un exitoso editor de periódicos e impresor en Filadelfia, la ciudad líder en las colonias, publicando la «Gaceta de Pensilvania» («Pennsylvania Gazette») a la edad de 23 años.​ Se hizo rico publicando este periódico y también el «Almanaque del pobre Richard», del que él era autor bajo el seudónimo de Richard Saunders.

>Como científico, fue una figura importante en la Ilustración estadounidense y la historia de la física por sus descubrimientos y teorías sobre la electricidad.

>Como inventor, es conocido por el pararrayos, las lentes bifocales, la armónica de cristal y la estufa Franklin, entre otros inventos.​

>Fundó muchas organizaciones cívicas, incluyendo la Compañía de la Biblioteca de Filadelfia, el primer departamento de bomberos de Filadelfia​ y fue pionero y el primer presidente de la Academia y Colegio de Filadelfia, que abrió sus puertas en 1751 y más tarde se convirtió en la Universidad de Pensilvania.​

>Organizó y fue el primer secretario de la Sociedad Filosófica Americana y fue elegido presidente en 1769. Franklin se convirtió en un héroe nacional en América como agente de varias colonias cuando encabezó un esfuerzo en Londres para que el Parlamento de Gran Bretaña derogara la impopular ley del timbre.

>De 1785 a 1788, sirvió como gobernador de Pensilvania. Al principio poseía y trataba con esclavos, pero a partir de la década de 1750, se opuso a la esclavitud desde una perspectiva económica y se convirtió en uno de los abolicionistas más destacados. >Su vida colorida y legado de logros científicos y políticos, y su estatus como uno de los Padres Fundadores más influyentes de América han visto a Franklin honrado más de dos siglos después de su muerte en acuñación y el billete de 100 dólares, buques de guerra y los nombres de muchas ciudades, instituciones educativas y corporaciones, así como innumerables referencias culturales.

Franklin fue dotado con la capacidad de la inventiva funcional, es decir, la creación de objetos que mejoraban la vida de las personas. Algunos de sus desarrollos le han ganado fama imperecedera, como el pararrayos.

Es así como nos acostumbramos a ver la imagen de un señor mayor jugando con un barrilete un día de tormenta en compañía de un niño (que no es otro que su hijo William, fruto de una relación ocasional de Benjamin Franklin).

Otro invento, es el bifocal; una lente que permitía llevar en un solo anteojo las correcciones de lejos y de cerca que necesita quienes sufren de presbicia.

Si bien, éstos son los más famosos, no son los únicos, ya que desarrolló un “long arm”, un brazo largo que le permitía acceder a las estanterías más alejadas, instrumento que le facilitaba las tareas durante sus años de comerciante.

Además desarrolló la estufa que lleva su nombre y el odómetro, una rueda que cuenta las revoluciones, para así conocer exactamente el recorrido de un vehículo. Este sistema fue usado por Franklin a fin de conocer los caminos más eficientes para la distribución del correo.

Las patas de rana le servían a Benjamin para nadar, deporte al que era muy afecto; al principio éstas eran de madera y cuero, pero el advenimiento del caucho las hizo más populares.

Sin embargo, el invento que más placer le causó, fue la armónica de cristal, un instrumento diseñado para emitir sonidos como los de las copas, cuando se las frota en su borde. El instrumento inventado en 1760, estaba inspirado en un concierto de copas de vino llenas de agua ejecutado por el músico inglés Edwuard Delaval, en Cambridge bajo la atenta mirada de Franklin. La armónica fue muy popular por cincuenta años pero hoy, solo es un recuerdo nostálgico de la inventiva de este hombre que además sentó las bases democráticas de una nación.