- 8 de marzo de 2025
Muchos sanjuaninos cambiaron el centro por los barrios cerrados

Los motivos de un fenómeno muy marcado
Los censos que se realizan cada diez años ya lo vienen indicando. Desde hace algunas décadas la Capital no sólo no crece en número de habitantes sino que sufre una constante despoblación relativa mientras la superficie ha sido ocupada por un voraz Estado que no conoce límites.
Caminar por la zona céntrica de San Juan –estamos hablando de la superficie encerrada por la Avenida de circunvalación- ofrece una realidad contundente: casi no hay cuadra que no tenga una vivienda en venta o alquiler. Y lo que es más llamativo es que hay carteles que llevan más de un año expuestos.
El fenómeno es tan masivo que merece ser analizado. Basta plantear el tema en una reunión de amigos para advertir que las explicaciones son tan variables como opinantes haya. Están por un lado los amantes de la vida en el centro y por el otro los que prefieren los barrios cerrados en las afuera, especialmente Santa Lucía, Rivadavia, Rawson, Pocito y Albardón.
El argumento más contundente de quienes optan por los barrios cerrados es la seguridad que brinda para la crianza de niños. “Me cansé de vivir entre extraños que vienen a trabajar en el centro y estacionan sus autos o esperan un ómnibus en las cercanías de mi casa. Quiero saber quiénes son mis vecinos”, argumentan los más jóvenes.
Pero hay otros no menos decisivos como una mejor calidad ambiental (menos ruidos, mayor forestación), o la sensación de mayor seguridad,
Para quienes se resisten a dejar el centro los argumentos son muy variados. Van desde la cercanía con el trabajo, al ahorro en transporte, la cantidad de servicios al alcance –entre ellos la educación- hasta la cercanía ante emergencias médicas o comercio nocturno.
Lo cierto es que la pandemia aceleró los pasos y obligó a mejorar las comunicaciones y que internet, teléfono, televisión ya no son patrimonio exclusivo del centro lo que permite vivir y hasta trabajar sin tener en cuenta las distancias.
Todo esto no termina de explicar el por qué hay tantas casas desocupadas en el centro. En estas páginas las explicaciones del titular de una importante inmobiliaria y de un reconocido arquitecto que analizan el fenómeno.

LEONARDO PÉREZ TINTO- INMOBILIARIA PÉREZ OLIVERA
“Se van del centro por los ruidos, la inseguridad y buscando espacios verdes”
-En los últimos años se ven más propiedades en venta en el centro, ¿por qué?
-Es un fenómeno que está pasando en varios lugares. La gente sale de las zonas residenciales del centro por tres temas principales: Uno es por una cuestión de ruidos. Las calles céntricas de viviendas como 25 de Mayo, Santa Fe, San Luis, sufrieron modificaciones en el tránsito por la Red Tulum, que la hace más ruidosas y molesto para vivir.
-¿Otra razón?
-Hay una cuestión de seguridad. El centro tiene mucha gente transitando en horario de comercio, pero en determinadas horas, lugares que son menos comerciales son inseguros.
-¿Y la tercera razón?
-Por espacios verdes, que en el centro es caro.
-¿También hay un cambio generacional?
-Así es. La casa de los padres no resulta atractiva a los hijos y ninguno opta por vivir en el centro. Y a los padres ya les queda grande la casa, con mucho esfuerzo para mantenerla.
-¿Qué busca el que quiere vivir en un barrio cerrado?
-Un matrimonio joven busca lugares donde los hijos puedan hacer vida de barrio. Que puedan andar en bicicleta o jugar a la pelota y los padres estén tranquilos.
-¿Hay barrios que no son cerrados que siguen siendo bien cotizados?
-Si hablamos de clase media, hay muchos. Para un público puntual como puede ser gerente de una empresa minera dispuesto a pagar un gran alquiler, busca barrios cerrados. De los tradicionales, para ese público, sólo tienen demanda Del Bono, Residencial y Los Olivos, son barrios muy cotizados.
-Otro dato es que tampoco aumentaron tanto los edificios dentro de las cuatro avenidas.
-Hay una realidad, el matrimonio mayor que ya no quiere vivir en una casa grande pero sí quiere un departamento de gran calidad, tiene muy pocas opciones de departamento nuevo y de gran categoría.

HÉCTOR MUÑOZ DARACT, ARQUITECTO
“Las casas quedan grandes y es muy caro adaptarlas”
-¿Por qué la gente se va del centro para residir?
-Generalmente son tendencias. La concentración poblacional del centro obedece a los servicios y por cuestiones comerciales. Los centros empiezan a convertirse en lugares de comercio, servicios, profesionales. Y empieza a desplazarse la población. La gente busca calidad de vida.
-Y ahora hay más servicios en los alrededores…
-Antes era prioritario venir al centro y ahora, con la conectividad, puede perfectamente hacer sus trámites desde su casa. A esto se suma que, desgraciadamente, el comercio que se aloja en el centro, pasa a ser con productos más populares, masivos, ya no son marcas selectas. Y para el que busca lo que llaman estatus, se va del centro.
-Respecto a ese estatus, vivir en barrio privado lo da…
-Empiezan a conformarse ciertos bolsones de pertenencia que es vivir en barrios privados.
-¿Cuánto influye que las casas del centro ya tienen más de 50 años?
-Mucho. Los herederos quieren vender en el centro porque ya no son cómodas para la organización familiar, hay que poner mucha plata porque empiezan los colapsos sanitarios y de electricidad. Y sacan cuenta de lo que sale una red nueva sobre una cáscara vieja. Pasa a ser muy caro y no es productivo.
-Con casas diseñadas para otro tipo de familia y de vida.
-Las casas quedan grandes. Se prefiere vivir con lo justo y no con espacios que sobran. No es lindo pasar por dormitorios vacíos. Y cuando quedan grande la casa, es una sensación fea.
-Es entendible que la gente mayor decida irse de la casa que queda grande pero muchos no eligen un departamento céntrico.
-Lo lógico sería que se cambiaran de la casa al departamento en el mismo centro, con buena calidad de carpintería, terminaciones, etcétera. Mendoza tiene más oferta de calidad, la oferta de sanjuanina es más plana, de menor calidad. Un metro cuadrado de calidad vale tres o cuatro veces más y muchas veces no se lo pagan los clientes. Por lo que eligen una casa más chica en las afueras.
-¿Cuál es la solución para que el centro no quede vacío?
-Hay una realidad, la gente más joven entiende la ciudad de una forma distinta. La gente adulta la entiende de una forma y el joven de otra. Es una pena ver ciudades vacías los fines de semana. La solución es fortalecer los espacios públicos, que sean amigables, con verde.
-La ciudad tiene eso con lugares como el Parque de Mayo…
-A veces, los parques pasan a tener otra función, cuando la convivencia respetuosa no es posible, porque cada uno pone la música a todo volumen, tirando los desperdicios, con vendedores sin orden tirados por todos lados. Eso repercute en los espacios verdes comunes y aleja de esos lugares a quienes buscan tener una convivencia armónica.


Motivos más mencionados en una encuesta
Independientemente de la opinión de expertos, estos datos surgen de una encuesta realizada por este medio entre vecinos de la zona céntrica
>Cada vez más, la ciudad es ocupada por edificios públicos (de los 3 poderes) que funcionan sólo 5 0 6 horas entre semana y el resto queda vacía
>Las calles se han transformado en estacionamiento de autos que no son de vecinos.
>Las líneas de ómnibus han creado grandes problemas en zonas céntricas aumentando el sentimiento de inseguridad.
>La edad de las edificaciones en el centro que obliga a importantes erogaciones para actualizar.