• 27 de enero de 2023

La globalización llegó a Chile

La globalización llegó a Chile

Hay turistas que perciben que el país vecino está más inseguro. Además, notaron menor presencia de carabineros en las calles.

Este verano, muchos argentinos se escandalizaron porque notaron a La Serena más insegura. Un robo de una camioneta y otros hechos aislados fueron suficientes para que comentaran cómo cambió Chile. En el vecino país le adjudican parte del problema a la expresidenta Michelle Bachelet durante su presidencia, cuando abrió las fronteras para la llegada de venezolanos, colombianos y haitianos. Muchos de ellos están trabajando en gastronomía y servicios, con salarios menores a los que cobran los chilenos. Y hay un porcentaje de delincuentes que se organizaron rápidamente e hicieron más inseguro al país. Sumado que se nota una menor presencia de carabineros y los cerramientos que quedaron en el centro de La Serena tras las protestas de hace tres años, impacta.

La realidad es que La Serena sigue siendo un lugar mucho más seguro que Buenos Aires, Rosario e incluso Mendoza. Se sigue caminando tranquilo por los centros turísticos, los adolescentes pueden ir y volver por la Avenida del Mar con tranquilidad incluso a la madrugada. También es cierto que muchos chilenos reclaman mayor presencia de los carabineros y que se expulse del país a los inmigrantes delincuentes.

Lo que realmente sucedió en Chile es que pasó a tener problemas similares a los de sus vecinos –todavía en grado mucho menor- y para los que buscaban tranquilidad absoluta, ya no es tan así.

Este clima de inseguridad fue percibido por algunos sanjuaninos que decidieron vacacionar en esa ciudad chilena. Según publicó el diario El Día, de Chile, el clima de inseguridad que pesa a nivel país no queda ajeno a las calles de la conurbación La Serena-Coquimbo. Sin ir más lejos, hace solo 3 semanas, una persona de 40 años fue asesinada en la ciudad de La Serena ingresando el hospital con 10 impactos de bala. Sin embargo, la comuna puerto fue ahora el centro de atención debido a que el primer homicidio para este 2023 se produjo en ella.

A raíz de esto, los distintos actores e instituciones relacionadas con la seguridad en la comuna han centrado su mirada en la seguridad pública y en el cómo afrontarla de la mejor manera, para que la sensación de tranquilidad y seguridad regrese a la comuna.

Desde la Municipalidad de Coquimbo, tienen conocimiento de la preocupación que predomina en los vecinos de la ciudad, por lo que para este año 2023, se aumentó el presupuesto en el ámbito de seguridad.

Delincuencia y drogadicción, son la combinación perfecta para que se haya producido un cambio tan drástico en uno de los puntos más fuertes que tenía Chile en general y que ahora parece ser el talón de Aquiles.

Por su lado, el diario La Tercera también hizo su análisis en agosto de 2022. Algo se nos quebró en las calles. En las de Santiago, Valparaíso, Iquique, Antofagasta, por solo mencionar algunas ciudades de este país. Por un sinfín de factores, la seguridad ciudadana se volvió frágil y fue vulnerada. Entre los grupos colgados de la movilización social de octubre de 2019, la pandemia de 2020, el regreso a una normalidad que mostró a muchos en la ruina, la lucha por sobrevivir en una crisis económica casi sin precedentes y la escasa dotación policial, la vida puertas afuera cambió su dinámica, publicó el medio trasandino.

Los sanjuaninos que la sufrieron

Varios sanjuaninos sintieron la inseguridad en carne propia, algunos con experiencias bastante traumáticas. Uno de ellos fue el empresario Pablo Rubiño que el sábado 7 de enero, estando en La Serena, sufrió el robo de su camioneta con toda la documentación personal y dinero, lo que complicó el retorno a la provincia.

Otro sanjuanino, Roberto Piriz, también reveló un mecanismo de ataque particular a los vehículos de argentinos. Pasa por clavos para pinchar las ruedas y cortes con arma blanca. En algunos casos son seguidos de cerca por otra movilidad esperando a que se detengan a cambiar la rueda para asaltarlos.

Muchos otros que, si bien no sufrieron la inseguridad tenían temor, coincidieron en que la falta de prevención policial en las calles, algo que obligó a las autoridades de Coquimbo a salir y tratar de llevar tranquilidad. Este tema de la inseguridad le hace un flaco favor al turismo receptivo al que apuesta Chile. Hace dos años atrás las revueltas sociales dieron un duro golpe. Luego sería la pandemia. Ahora que está el sector en etapa de recuperación aparece la falta de seguridad.

A qué se atribuye la inseguridad

Desde hace unos siete u ocho años, Chile se convirtió en la puerta de ingreso para inmigrantes colombianos, haitianos y venezolanos, principalmente. La corriente migratoria empezó a instalarse por el 2015 desde el norte, como Iquique y Antofagasta. Era común ver en el puerto de esas zonas cómo los haitianos, principalmente, pasaban horas agolpados esperando obtener un trabajo para poder comer.

Con el correr de los años los inmigrantes fueron desplazándose hacia abajo en el mapa y el número de extranjeros que ingresaron creció de manera importante y con ello ya no eran solamente personas que buscaban trabajo, sino muchos de ellos con antecedentes de una vida marginal.

Así es que aparecieron los grupos que cobran por brindar seguridad a los comerciantes de determinados lugares. También quienes atentan contra vehículos en movimiento o estacionados con fines de robo.

Precios

Uno de los puntos que juega en contra de cualquier argentino que vaya a Chiles es el tema del cambio. Con una cotización de 0,23 respecto al peso argentino, ya se terminó la época del “deme dos”.

Comer en Chile resulta caro, mientras que la indumentaria presenta una situación dispar. Algunas prendas están realmente a precio conveniente, pero hay que caminar aún en los outlets. El calzado presenta una situación similar.

Donde hay diferencias marcadas en el rubro electrónica. Los celulares, algo muy buscado por los argentinos en Chile, son algo más caros que en nuestro país.

Los que vendieron departamentos

Muchos sanjuaninos decidieron hace algunos años comprar un departamento en La Serena o Coquimbo. Muchos lo hicieron como inversión para alquilar y otros simplemente para tener un lugar de veraneo en el Pacífico.

Con el correr de los años, el aumento del dólar y la devaluación de la moneda argentina, mantener un departamento en Chile se volvió algo complicado, un lujo caro si no se lo quería alquilar.

Por esa razón muchos sanjuaninos decidieron vender y no les costó mucho. Una nueva tendencia de habitantes de Santiago que ya no eligen veranear en Viña y cambiaron por La Serena, se volvieron en buenos clientes para poder vender.