- 5 de abril de 2025
¿En la Justicia como en el fútbol?


POR EDUARDO QUATTROPANI
Es verdad que lo que pasa, por ejemplo, con Gago y el Muñeco Gallardo, hasta hoy, en materia de tolerancia y análisis, es envidiable desde la visión y vivencia del operador judicial.
En efecto, a ambos técnicos «les han comprado» cuántos refuerzos se les ha ocurrido, jugadores que eran figuras en sus rivales domésticos y hasta capitanes en sus equipos en ocasión no ocupan ni un lugar entre los suplentes, sin hablar de los traídos del exterior con pergaminos varios y, sin embargo, han fracasado hasta el presente en todo compromiso de relevancia.
A pesar de ello, lustran pergaminos ganándole un “partidito” a Barracas, a Defensa y Justicia o a Central Córdoba, cuyos planteles no cuestan todos juntos lo que cotiza uno solo de todos los refuerzos de aquellos.
Esa realidad es absolutamente contraria a lo que se da en el tema Seguridad, donde siempre los recursos son escasos, brillan más las derrotas que los éxitos y donde, fundamentalmente, ninguna mejora ni espejismo de esta encontrará, por lo general, un juicio de valor positivo.
La pregunta que se impone responder es cuál de las posturas es la equivocada. Mi respuesta es que no cabe duda de que la futbolística está alejada de la racionalidad, en tanto la referida a la seguridad tiene o se asienta en una lógica implacable, esto es, que, aunque se mejoren las estadísticas, mientras haya delitos, por las causas que fueren, la crítica, el juicio de valor negativo se explicará por sí mismo.
En materia de seguridad debe aprenderse a vivir «debiendo», el tema es asumirlo y esforzarse en fortalecer sistemas, en mejorar el servicio, pues se está muy lejos de poder hacer uso de disfrazar la realidad como lo hacen los técnicos en sus conferencias de prensa, donde al parecer vieron un partido y viven una realidad que nosotros no advertimos.
Lo único que sirve y da crédito es mostrar que se trabaja 24/7 para cambiar la realidad, de eso no tengo duda alguna.