- 8 de marzo de 2025
Empieza un año político que no será pacífico

El año que pasó, fue de relativa calma en la política sanjuanina.
Con una flamante gestión del Gobierno de Marcelo Orrego, y un peronismo que tenía muchas heridas que curar tras 20 años de mandar en la provincia, no hubo grandes encontronazos. Incluso en la propia Cámara de Diputados, no se produjeron grandes choques.
Este 2025, será de una exigencia mayor para la gestión Orrego.
Ya pudieron avizorarlo con los gremios docentes. Poca paciencia demostró quienes mandan en UDAP y UDA. Y ya empezaron con los paros.
Y de a poco, le costará más al oficialismo conseguir triunfos en la Legislatura.
En el peronismo se empiezan a mostrar diferentes estrategias.
El sector de José Luis Gioja, apunta fuerte sus cañones al Gobierno nacional. Las mayores críticas van dirigidas a la gestión de Javier Milei pero no se ensañan con el Gobierno local.
El sector más duro será el de quienes le responden a Sergio Uñac.
En el entorno del senador nacional, aseguran que buscarán rallarle la pintura a la gestión actual. Y ante cualquier situación de gestión, buscarán cómo transformarlo en rédito político.
Es más, aseguran en su entorno, que Uñac está convencido que la era de la derecha en Argentina está comenzando y le queda bastante tiempo de preferencia en el electorado, por lo que apuntará más a desgastar en lo local que fijarse en lo nacional.
En el propio peronismo se esperan chispazos.
El enfrentamiento de Uñac con el exintendente Emilio Baistrocchi, se trasladó al Tribunal de Cuentas, en donde los alfiles de Uñac mueven sus fichas para cuestionar el ejercicio 2023 en Capital.
Se espera ahora una respuesta del exjefe comunal. Como parte del círculo chico de Uñac durante años, posiblemente tenga guardada algunas cartas que mostrará como represalia.
Mientras Fabián Gramajo pone firme los codos para que no lo saquen de su espacio y Carlos Munisaga busca hacer en el sur su bastión político, todavía el peronismo no se dio su espacio y tiempo para debatir qué buscarán hacer en el 2027.
Los libertarios, por su parte, son conscientes que tendrán chances electorales si el presidente tiene altos índices de popularidad.
No tienen estructuras y no les importa tanto hacerlas. Con José Peluc como el principal nexo con Karina Milei y Martín Menem, buscarán purificar el sector, aclarando quiénes son y quiénes no son los guardianes del “león”.
En sus últimas entrevistas, Peluc fue más crítico con la gestión provincial que contra el peronismo.
Saben que los votos de la derecha se dividirán con Orrego, por lo que buscan desgastarlo.
Con un escenario con urna electoral antes que los problemas reales, este 2025 será un año “picante” desde lo político.