• 30 de marzo de 2024

La paz se construye con Progreso

La paz se construye con Progreso

POR MARCELO DELGADO

El proceso de empobrecimiento de una comunidad, región o país, más temprano o tarde; va provocando tensiones y violencia.

En Argentina, con un 57% de pobres, cuyo 10% están en estado de indigencia, es esperable que la conflictividad social crezca, pero también el delito, narcotráfico, trata de personas, atentados contra la propiedad; entre otros males. Cuando la situación de carencias se mantiene en el tiempo, al deterioro se extiende a la salud, la educación y afecta también las relaciones familiares y sociales.

Esta realidad nos interpela a pensar colectivamente, como preservar la “paz social”, constituir vínculos comunitarios que favorezcan el desarrollo de las personas, familias, empresas, organizaciones sociales, culturales, deportivas, para gozar de las libertades individuales y garantizar los derechos básicos, sociales y colectivos de los ciudadanos.

La propuesta es que, en los cimientos de esta construcción, esté el “progreso”. Si bien, no es condición suficiente, resulta insumo necesario para transitar el desafío. Una sociedad en retroceso, pone en riesgo la paz, mientras que una comunidad cuando se desarrolla, tiene mejores posibilidades de promover una organización comunitaria, inclusiva y respetuosa de los derechos de cada uno, y comprometida con las obligaciones cívicas.

El “progreso”, tiene connotaciones económicas, pero no se agota en la creación de riqueza, sino presupone un esfuerzo, mediante el trabajo, la inversión y la organización de unidades productivas y de servicios. Pero también implica estudiar, investigar, consolidar valores culturales, promover la vida sana, actividad deportiva, favorecer la recreación y el apego a los hábitos virtuosos.

Esta decisión individual y colectiva de “progresar”, necesita factores de enclave, que se mantengan en el tiempo y configuren las reglas, con las que nos vamos a regir. Las empresas, exigen estabilidad jurídica y fiscal. Los consumidores, queremos precios transparentes y justos. La comunidad reclama igualdad para todos, eliminando privilegios y acomodos. Una justica de fondo, y no sólo de forma. La sociedad, acceso a los bienes públicos, como la salud, educación, seguridad y respecto a los derechos de cada uno.

El progreso entonces, asoma como una tarea sencilla de comprender, y compleja de implementar. Las políticas públicas y las conductas colectivas, son insumos básicos, para que en camino de la prosperidad, se construya la paz.

El 25 de mayo próximo, Argentina tiene una nueva oportunidad federal e histórica, de acordar objetivos, agendas, y compromisos, que se orienten al progreso, o postergar nuevamente la tan ansiada paz social.