• 7 de diciembre de 2024

¿El mensaje es “Peguen muchachos, y digan: son mentirosas”?

¿El mensaje es “Peguen muchachos, y digan: son mentirosas”?

POR EDUARDO QUATROPANI

El Ministro de Justicia de la Nación, en un acto de, como mínimo, desconceptualización jurídica-institucional, ha salido a “batallar” mediáticamente por el aumento de las penas por falsas denuncias agravándolas cuando se refieran a cuestiones de género o temas sexuales.

Lo primero que hay que decir es que toda propuesta aislada y de ocasión, como lo es aumentar o disminuir penas previstas en el Código Penal, debe describirse como un “parche” más que traerá aparejado, de ordinario, la ruptura de la sistematización del Código de fondo. Dicho de manera coloquial, sería bueno se pongan a trabajar en modernizar y ordenar ese viejo y maltratado Código, y paren de hacer política mediática con él.

Por si no se entiende del todo, la goma ya no da para seguir llevándola a la gomería, hay que comprar una nueva, ¿ok?
Por otra parte, hay que entender que se está tratando de dinamitar todo lo avanzado en política de violencia de género y, en su lugar, se propone instalar el paradigma de “la mujer mentirosa”.

Quienes trabajamos día a día en la temática, quienes no sólo tenemos estadísticas, sino que, además, las sabemos interpretar, podemos dar fe de que ello es falso, de falsedad absoluta; afirmar esa situación como un hecho frecuente es una verdadera “canallada”.
Quienes trabajamos en esa temática sabemos que el problema o los problemas son otros, así por ejemplo:

  1. La gran cantidad de mujeres víctimas de violencia que desisten de continuar los procesos por su vulnerabilidad en todo sentido.
  2. Las dificultades probatorias que traen aparejados hechos que, de común, ocurren en la intimidad.
  3. La falta de contención por parte del Estado, aún reconociendo los grandes avances producidos en los últimos tiempos.
    Como soy consciente de que hay gente a la que le gusta demasiado “predicar” desde los cafés o desde la comodidad de sus despachos, quedan invitados a “trabajar” unos días en la UFI CAVIG o en la UFI ANIVI, ahí verán en el estado que llegan “las mentirosas”, según sus torpes visiones.

Habrá alguna falsa denuncia, seguro que sí, de ahí a generalizarlo es demasiado dañino, demasiada ignorancia, es casi como invitar a los violentos a pegar tranquilos y después tratarlas de mentirosas; mucho ¿no?